La medida tomada por los administradores concursales de la fábrica de Maliaño es la menos traumática posible
Los administradores concursales de B3 Cable han presentado un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de extinción para 75 trabajadores de la fábrica de Maliaño. Se trata de los operarios más próximos a la jubilación, mayores de 59 años, y es la medida menos traumática ya que supone una pasarela a la jubilación.
La compañía de Maliaño, con una plantilla de 308 trabajadores (233 tras los despidos), se encuentra en concurso de acreedores y en proceso de liquidación. Los despidos se acometen para aligerar el coste económico de la compañía y poder afrontar las cuantiosas deudas con los acreedores. El ERE, que se aplica de acuerdo con la reforma laboral, incluye a los trabajadores de entre 59 y 64 años ya que los mayores de esta edad están dejando la empresa por jubilación a medida que cumplen 65 años.
El presidente del comité de empresa de la fábrica de Maliaño, Miguel Ángel Muñiz, explicó que todos ellos entrarán en la jubilación cuando se agoten los dos años de paro ya que los de 59 años lo podrán hacer con 61. Muñoz indicó que aún así la plantilla está «muy mal» porque son empleados «de toda la vida que llevan como mínimo 35 años trabajando». Además, los despidos se llevan a cabo «sin posibilidad de negociar» y aplicando estrictamente lo que establece la última reforma laboral con una indemnización de 20 días por año trabajado y un límite de 12 mensualidades.
Los administradores concursales han presentado ya en el Juzgado de lo Mercantil el plan de liquidación donde se establecen las condiciones que deben regir para el pago a los acreedores. Muñiz indicó que se está en continuo contacto con los inversores que podrían estar interesados en adquirir la fábrica, sobre todo con dos de ellos. «En eso estamos todos, para intentar salvar la fábrica. Actualmente el personal está con mucha inquietud ante el futuro incierto». Aún así, hay esperanzas aunque no son muchas debido a la situación de deudas que tiene que afrontar la empresa. La plantilla está al tiempo con un ERE de suspensión debido a la baja carga de trabajo.
Viabilidad
Los trabajadores de B3 Cable se reunieron ayer en una asamblea en la que el comité de empresa informó de los últimos despidos. Una medida que esperan que, de momento, no se amplíe en lo que queda de año pero que en el futuro «sí puede que haya más extinciones».
Fuentes conocedoras de la situación aseguraron ayer a este periódico que los administradores estiman que la empresa puede ser viable con 120 trabajadores, con lo que el excedente actual de plantilla serían aún de unos 100 trabajajdores.
La planta de Maliaño retomó su actividad al 10% de su capacidad de trabajo a finales de noviembre después de que los administradores concursales consiguieron desbloquear la financiación del banco americano PNC Bank, su principal acreedor, al que adeuda unos 19 millones de euros.
B3 Cable se enfrenta desde hace dos años a una caída dramática de las ventas de cable de cobre, lo que llevó a plantear en marzo un ERE de extinción que afectaba a un centenar de trabajadores, de los que 84 eran prejubilaciones y 15 bajas. Sin embargo el grueso del proceso se paralizó debido a problemas económicos que no permitían afrontar el coste del ajuste laboral pactado. Fue entonces cuando se aceleró el concurso de acreedores. Este paso se dio ante la falta de compradores y después de agotar el plazo legal de cuatro meses desde que se planteara el preconcurso. Varios han sido los grupos que durante los últimos meses han mostrado interés en la compañía. Sin embargo, al final no hubo acuerdo económico con PNC Bank.
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