Cuenta con 200 empleados menos que en 2009 y gasta un 3% más en sueldos
S. DE LA FUENTE - OURENSE El anuncio del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) en la Diputación de Ourense ha caído como agua helada sobre los 32 trabajadores con contrato indefinido afectados. El presidente del comité de empresa, José Fírvida (CCOO), no ha estudiado todavía con detalle la memoria justificativa del ERE ni la relación de trabajadores que perderán su trabajo, pero ya anuncia que "lo primero es no aceptarlo". "Ya se verá luego, no depende solo de mí, tengo que escuchar a los demás miembros del comité de empresa y a los trabajadores", añade.
Ni el comité de empresa ni la junta de personal (presidida por José Antonio Blanco, concejal del PP y compañero del presidente Manuel Baltar en la corporación de Esgos) han supuesto hasta la fecha problema alguno en las acciones de la Presidencia. Incluso el pasado mes de mayo firmaron sin hacer demasiado ruido la modificación del acuerdo regulador por el que perdieron beneficios adquiridos como ayudas al pago de la hipoteca o un seguro médico privado. La Diputación gastaba en estos extras 710.000 euros al año.
Pero esta vez, José Fírvida reconoce que el comité de empresa tiene que actuar y oponerse al ERE. Lo primero ha sido convocar una reunión para el lunes (hoy el 60% de la plantilla hace puente) para analizar "qué línea seguimos y cuales serán las medidas a adoptar", señala. Entiende que todos los trabajadores representados tienen que opinar y plantear "direcciones".
La motivación económica como justificación para sostener este despido colectivo en la Diputación no convence del todo al portavoz de los trabajadores, aunque admite que se cumple el requisito planteado por el decreto del 29 de octubre que autoriza los ERE en entes públicos con más de 300 trabajadores cuando las transferencias de crédito al organismo se hayan reducido un 5% en el último año.
Sin embargo, los recortes salariales y la reducción más drástica de la plantilla iniciada en enero de 2012 no se refleja en una reducción del gasto de personal, ya que esta partida no ha dejado de subir desde 2009. En 2013 se gastará un 3% más en este capítulo que hace tres años. En cuanto a la evolución de la plantilla, que llegó a tener 961 trabajadores en 2010, se ha reducido en cuatro años en 200 empleados menos.
Con los datos en la mano, Fírvida considera que la situación económica no es la mejor, pero matiza que tampoco ha variado tanto con respecto a años anteriores. De hecho, recuerda que tanto el comité de empresa como la junta de personal cedieron ante la supresión de privilegios acordada y aprobada en pleno en mayo "porque se comprometió a que no habría despidos, salvo que la situación económica fuese extremadamente grave". No es el caso, matiza, y confía en "suavizar" el expediente anunciado el miércoles durante la fase de negociación.
Entre las alternativas que baraja José Fírvida está la posibilidad de que las bajas laborales sean temporales. Y al igual que se acordó que los derechos suprimidos serán restituidos cuando la economía mejore, el comité de empresa pedirá que también este ERE sea transitorio.
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