Rioglass se planta en 44 despidos y un ERE de 8 meses en las plantas de Mieres y Lena

La multinacional trasladó ayer al comité de empresa su última oferta, que deberá ser refrendada hoy por el conjunto de la plantilla

Mieres del Camino, D. M.

La dirección de Rioglass Solar no está dispuesta a ceder más. La multinacional presentó ayer al comité de empresa de las fábricas de Mieres y Lena una propuesta definitiva para abordar su plan de repliegue empresarial en la comarca. Finalmente, las negociaciones llegaron a un punto y final con 44 despidos, dos menos de los planteados el martes y la mitad de los requeridos inicialmente (91). Los trabajadores deberán dar hoy el visto bueno al acuerdo en una asamblea que se celebrará a las cuatro de la tarde en las instalaciones del polígono de Sovilla.

José Daniel González, representante del SOMA-FITAG-UGT, explicó ayer a este diario que la compañía se ha plantado en 44 despidos. Según lo acordado ayer, en la fábrica de Mieres se abordarían 34, quedando una plantilla de 40. En principio, esta planta iba a cerrar. En Villallana, los 16 despidos iniciales quedaron, finalmente, en 10. Si la plantilla refrenda mañana esta planificación, la próxima semana se informará al personal afectado que causará baja de la empresa. Se les indemnizará con 35 días por año trabajado, sin el límite de anualidad contemplado en la reforma laboral. Estos excedentes se integrarán en una bolsa de trabajo para tener prioridad en una hipotética reincorporación en caso de que la actividad repunte.

Así las cosas, Rioglass Solar mantendrá en la comarca una plantilla de 121 trabajadores. Estos empleados, no obstante, se enfrentarán también a una situación muy complicada. La multinacional aplicará un nuevo expediente de regulación de empleo (ERE), de carácter rotativo, que se prolongará hasta el 31 de julio. La empresa se ha comprometido a complementar la prestación por desempleo aportando el 30 por ciento de los complementos fijos, según los sindicatos, unos 400 euros al mes por trabajador. El problema radica en que buena parte de la plantilla se ha visto inmersa en anteriores ERE y no andan muy sobrados en cuanto a la cobertura del paro, con casos de dos y tres meses únicamente por disfrutar. «También se ha logrado un compromiso por parte de la empresa para hacer nuevas inversiones en la planta de Sovilla», señaló José Daniel González. Esta actuaciones permitirán habilitar una linea de producción de espejos denominados heliostratos. Tras llegar a lo que parece el final de la negociación, el número de despidos se ha concretado, pero los trabajadores siguen sin tener nada claro el futuro de las fábricas de Mieres y Lena.